La verdadera circularidad, de la clase que se necesita para producir un impacto positivo y duradero sobre la huella ambiental de la industria textil y del vestuario, requiere la disposición para romper el lente a través del cual vemos nuestro lugar en la cadena de abastecimiento. Eso parece difícil - y puede serlo - pero, como descubrimos en Lenzing, se hace más fácil luego de comenzar. Cuando la sostenibilidad se convierte en un valor fundamental que impulsa las decisiones desde la operación hasta el mercadeo, las compañías descubren que sus empleados, sus clientes, y sus proveedores se comprometen, y que la creatividad y la innovación florecen en una cultura transparente y con propósito.
Dé una nueva forma a su red de abastecimiento
La cadena tradicional de abastecimiento en textiles es rígida y lineal. Las compañías pueden interactuar con sus clientes por un lado y con los proveedores por el otro pero, una vez que el camión sale del centro de distribución, poco se piensa en el producto final que se encuentra varios pasos más adelante en la cadena. Debemos ampliar esa perspectiva y enfocarnos claramente en el final de la cadena de abastecimiento como una red de abastecimiento. Solo entonces podremos crear productos responsables que realmente atraigan a los consumidores con mentalidad sustentable que influyen en nuestro futuro.
En Lenzing, nuestro viaje hacia la circularidad se aceleró cuando nos conectamos con los grupos interesados arriba de la cadena, e incluso con otros productores de fibra. En lugar de clasificar a una compañía como “proveedor” o “clientes”, o incluso como “competidor”, nos asociamos con quienes comparten nuestro compromiso de mejorar nuestro impacto sobre las personas y el planeta. Nuestra tecnología TENCEL™ Lyocell con REFIBRA™ es el resultado directo de esta nueva perspectiva. Vimos el creciente mercado de compradores conscientes y decidimos aumentar el uso de contenido reciclado. Nuestros ingenieros desarrollaron un revolucionario proceso de manufactura que recicla los textiles de algodón de la producción de prendas y los desperdicios de los consumidores para producir pulpa. Esta pulpa luego se combina con pulpa de árboles cultivados de forma responsable y se convierte en la nueva fibra TENCEL™ Lyocell en nuestras instalaciones que han sido galardonadas. Nuestras fibras TENCEL™ Lyocell con tecnología REFIBRA™ establecieron un nuevo estándar para las fibras al combinar circularidad, transparencia, y bajo impacto de carbono.
Valores compartidos para una colaboración efectiva
Para que la industria textil y de la confección cambie realmente, debemos dar pasos atrevidos, abandonar las antiguas limitaciones, y unir fuerzas para crear productos y procesos más responsables con el medio ambiente. Ninguna compañía o cadena de abastecimiento por sí sola lo puede lograr. Lo más importante es que todos tenemos que contribuir a educar a los consumidores y ayudar a las marcas y las tiendas a beneficiarse de nuestros esfuerzos.
Esto convierte a algodón de los Estados Unidos en un socio natural de Lenzing dadas nuestras múltiples similitudes y nuestro compromiso común de reducir los impactos sobre el medio ambiente. Como fibras botánicas, compartimos una conexión con la tierra y el respeto por sus recursos. Invertimos en la transparencia y de hecho, utilizamos la misma tecnología de blockchain de TextileGenesis™ para garantizar la trazabilidad desde la fibra hasta la producción y la distribución. Con el TENCEL™ Lyocell que se fabrica en nuestra planta en Alabama, junto con el algodón de los Estados Unidos, podemos adelantar una propuesta convincente, sostenible hecha de fibras naturales Made in USA, que sea atractiva para nuestros consumidores conscientes.
Obviamente la colaboración puede ser un poco más difícil en distintas situaciones. Tal vez tengamos que desafiarnos a nosotros mismos y a otros, pero eso también se hará más fácil a medida que la gente se dé cuenta de que los beneficios de avanzar generalmente compensan la incomodidad de quedarse quieto. La belleza de avanzar hacia una industria de textiles y de la confección más circular es que no es un juego de suma cero. Al hacer menos daño al planeta y sus ecosistemas, todos nos beneficiamos en el largo plazo. Mejoramos la resiliencia y la viabilidad de toda la industria y aumentamos los beneficios para todos, desde los consumidores, las marcas y las tiendas, hasta los productores lo cual nos lleva a un futuro mejor.